Hace tiempo que esta red social ha perdido encanto para mí, encontré a muchísimas personas, pero continuo teniendo contacto con mis amigos de siempre.
Mi lado cotilla ha hecho conservar la cuenta durante años, pero ya no quiero más Facebook, no quiero colaborar a tejer esta red de insustanciales lazos, ni degradar más la palabra «amigo».
Hubo un lugar y un momento para muchos de esos «amigos», esos momentos fueron geniales y en esos momentos fueron realmente mis amigos (esta vez sin comillas). Lo que la vida ha separado, no lo puede volver a unir Facebook.
Soy consciente que existen muchos casos de éxito, gente que encuentra en Facebook algo más que un Gran Hermano a doble espacio; quien por el hecho de publicar su ubicación, intención, momento actual… hace de su vida un lugar mejor (No me estoy mofando!! no lo entiendo pero no me estoy mofando).
Hay quien me ha tildado de radical por hacer algo así, pero encuentro que Facebook es un producto inmaduro, que ha evolucionado en la manera de presentarnos sus cerradas pautas ¿Porque nunca no se ha podido clasificar a las personas en amigos, conocidos, compañeros…? así podríamos haber elegido que explicar a quien!!! O a la inversa ¿nadie le ha molestado jamás el SPAM de algun@s que monopolizan tú muro haciendo casi imposible encontrar al resto de tus «amigos»?? La libertad de escoger no venia de serie en Facebook.
En fin, ya llegarán otras redes sociales como la Google+, esperemos que aprendan del primogénito y lo hagan mucho mejor, por otro lado me quedo tranquilo sabiendo que Mark Zuckerberg no pasará hambre porque yo cierre mi cuenta.